"Cultura como usina, como fábrica de símbolos de un pueblo. Cultura como un conjunto de signos de cada comunidad y de toda la nación. Cultura como el sentido de nuestros actos, la suma de nuestros gestos, el sentido de nuestro modo de vida." [GIL, Gilberto. Discurso de asunción como Ministro de Cultura de Brasil, 2003]

sábado, 10 de julio de 2010

Vals/Waltz


Sí, yo también me acordé de la fiesta de “presentación” a la sociedad de mi prima Sandy, una tradición caduca que en nuestros días sólo sirve de pretexto para reunir a la familia, beber y bailar de gorra. Claro, y la ocasión de gastar no poca plata en dicha celebración. XV o XVII años, esa tradición que sólo en algunos países se da, influenciados primordialmente por las costumbres europeas traídas a las tierras americanas en época de la conquista.

Pero igual, no es nuestro objeto hablar de esta costumbre, que claro, constituye una forma de expresión cultural, pero no es materia en esta sección ahondar en ello. Mas bien, nuestro punto desde el inicio fue hablar del estilo de música característico en ella: El Vals.

El Vals, o Walzt, es un estilo de música y baile originario de las tierras de Austria, el cual alcanzó su máxima popularidad en Viena, durante el siglo XVIII. Pronto fue extendiéndose por varios países de Europa como Francia, Alemania, Rusia, España, etc. La palabra Vals, proviene de la palabra alemana Walsen, la cual hace referencia al efecto de girar. ¿Ahora ya sabemos por donde vamos, no?

El vals es una serie de notas lentas y rápidas acompasadas, que siguen un patrón establecido. Este patrón es el de los compases ¾, en que un sonido fuerte, es seguido por dos más, repitiéndose de modo incesante. Y en este sonido incesante, puede incrementar la rapidez en el patrón, o igual puede continuar una misma velocidad.

Chopin, Johann Strauss y Tchaikovsky, sólo son algunos de los más grandes exponentes y compositores de Vals en la historia de la humanidad, pero de igual modo, existen muchos estilos de vals, como el peruano, venezolano, argentino, colombiano, mexicano, brasileño, francés, vienés entre muchos otros. A que les da curiosidad, ¿verdad?

Como un dato muy curioso, en México, fue en el mandato de Porfirio Díaz que el vals tuvo su auge en nuestro país, y los compositores vieron su mayor esplendor, esto respondió a solo un motivo, y es que en ese entonces, la influencia francesa se adoptó como el estilo de vida en las altas esferas de la sociedad. De este periodo fue el gran compositor mexicano, Juventino Rosas.

Pero lejos de la historia del vals, lo cierto es que musicalmente hablando, es una creación armónica de sonidos, que se unen siguiendo una establecida secuencia, y la cual se produce a través de la combinación de instrumentos musicales como: violines, guitarras, chelos, arpas, y cualquier instrumento que conjugado con los demás den como resultado la perfecta combinación para un vals.

Nadie podrá olvidar nunca piezas como el Vals de las Flores del Cascanueces, o el del Lago de los Cisnes, o el Danubio Azul. Son piezas que deleitan al oído, de una manera grata, pues no solo es el disfrute de las formas musicales, sino también de un modo placentero por su estructura musical. Así, que vamos, escucha un vals, y ya si quieres, toma a quien este a tu lado, y ponte a girar con él o ella.

Esta es otra, de las bellas formas musicales que el hombre ha creado para la humanidad, con su ingenio e imaginación.



Marcos Hernández Bustamante

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